Actualización al 2020
Se refiere a diversos síndromes neurológicos que, entre sus síntomas, incluyen pérdida de habilidades cognitivas como memoria, alteraciones del pensamiento y cambios en conducta social, los que impiden que las personas se desenvuelvan de forma normal. El Alzheimer es el principal tipo de demencia en adultos mayores de 60 años. El principal factor de riesgo es la edad.
Frecuencia: el porcentaje de la población con demencia es del 5% de los mayores de 65 años y 50% en los mayores de 85.
Los síntomas de demencia son:
- Pérdida de memoria.
- Desorientación.
- Dificultad para expresarse, por no encontrar las palabras o no poder articularlas.
- Alteraciones en el pensamiento y ejecución de tareas.
- Descoordinación motora o ataxia.
- Alteraciones de la personalidad.
- Enfermedades de salud mental, como depresión, ansiedad, agitación, entre otras.
La demencia se produce por un daño degenerativo en las neuronas y sus conexiones por acumulo de proteínas anormales. En general el tipo de proteína anormal que se acumula determina el tipo de demencia. Las diversas causas son:
- Alzheimer: presencia de proteínas anormales que afectan el funcionamiento neuronal y la conexión entre estas células cerebrales especialmente en los centros de memoria. Por lo que se caracteriza por pérdida de memoria, principalmente.
- Demencia con cuerpos de Lewy, que son proteínas anormales que alteran las neuronas. Produce alucinaciones visuales y problemas de concentración.
- Demencia vascular: se dañan los vasos sanguíneos que llevan sangre al cerebro. Se caracteriza por la dificultad para realizar tareas y solucionar problemas, como también por lentitud de pensamiento y falta de concentración.
- Demencia frontotemporal: se destruyen las neuronas del lóbulo temporal y frontal, áreas asociadas al comportamiento y personalidad, por lo que estas se ven alteradas.
Algunos hábitos que pueden ayudar a evitar la demencia son:
- Mantenerse activo física y mentalmente.
- No fumar.
- Tener una dieta balanceada y un peso adecuado.
- Controla factores de riesgo cardiovascular, como obesidad, hipertensión arterial, colesterol alto y diabetes mellitus.
- Tener una buena calidad de sueño.
No existe cura para las demencias, pero sí existen fármacos para retrasar su progreso y manejar los síntomas.
- Inhibidores de la colinesterasa: aumentan los niveles de comunicación entre las neuronas.
- Memantina: retrasa la evolución de los síntomas.
Terapias no farmacológicas de apoyo al paciente, la familia y quien lo cuida.